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domingo, 22 de diciembre de 2024

Andréi Kononov - Infiltrados desenmascarando a la izquierda globalista 2 (29.12.2015)

 


Andréi Kononov

PARTE II – COMPAÑEROS DE VIAJE

https://www.geopolitika.ru/es/article/infiltrados-desenmascarando-la-izquierda-globalista-2


Ahora es el momento de analizar otros medios y organizaciones no gubernamentales que aseguran ser “independientes”, “sin ánimo de lucro”, y que incluso muchos gente todavía los engloban dentro de los medios “alternativos, antisistema y próximos a la izquierda”, que en su día prestaron un inusitado interés y apoyo a los movimientos 15M y Occupy Wall Street, pero que más adelante han mostrado su faceta pro-imperialista y globalista de una manera descarada.

EL HUFFINGTON POST

Uno de los medios supuestamente “de izquierdas” a los que ha sido fácil desenmascarar ha sido el Huffington Post, ligado al grupo editorial pro-globalista de “El País“, el cual pasó en tiempo récord de apoyar los movimientos 15M y Occupy Wall Street (aunque antes también a las primaveras árabes) a mostrar sus simpatías no menos disimuladas hacia el Euromaidán. Tenemos el caso de la periodista del Huff Andrea Chalupa, que en 2011 estaba haciendo apología del movimiento Occupy desde Zuccotti Park… Para terminar dos años después fundando plataformas digitales en apoyo a la Junta fascista llegada al poder en Kiev gracias a la inestimable labor de los globalistas:

La periodista del Huffington Post Andrea Chalupa ha pasado de ser una ferviente defensora del movimiento Occupy Wall Street a ser una de las co-fundadoras de la plataforma digital Maidán y Globalmaidan. Pero no tenemos más que adentrarnos un momento en las publicaciones del Huffington Post en su versión en castellano para darnos de bruces con un radicalismo pro-Maidán que ya quisieran para sí muchos nacionalistas ucranianos: “La izquierda proveniente del tronco marxista ha demostrado una vez más que prefiere el autoritarismo y el machismo brutal y despiadado de la Realpolitik a la siempre lenta construcción de Estados de derecho. Para esta izquierda, cualquier revolución es falsa si esto significa dar paso a una expresión popular que no coincida con su criterio de lo que debe ser un movimiento popular. El sorprendente apoyo a Putin de la izquierda proveniente del socialismo y del comunismo se ha conjugado con un desprecio contra la revolución del Maidán que roza con la paranoia: todo ha sido obra de “agentes occidentales” y de la “Unión Europea”, que han apoyado a unos “fascistas” e incluso “nazis” para derrocar a un Gobierno legítimo. Que el “Gobierno legítimo” hubiera violado la Constitución, proclamado unas leyes autoritarias que nadie en España habría aceptado, aplastado con la policía a centenares de estudiantes y luego disparado indiscriminadamente contra unos miles de personas, matando a unas cien, daba igual. Y que en realidad, antes del Maidán, ni los EEUU ni la UE hubieran albergado demasiadas ganas de un acercamiento a Ucrania (que consideraban oneroso en el caso europeo e innecesario en el estadounidense) tampoco parece haber sido percibido. Fue la reacción real y concreta de miles de personas en Ucrania que salieron a luchar por lo que consideraban sus derechos lo que obligó a ambas potencias a mostrar tímidamente su apoyo (…) Pero si existía cierta excusa para que la izquierda que yo llamo estatalista no mostrara su apoyo al Maidán (la realidad de los grupos nacionalistas que se aprovecharon de la revolución para intentar acrecentar su influencia, con sólo relativo éxito, por cierto), el apoyo a la invasión rusa de Crimea y a la agitación nostálgica de los pro-Putin en el Este de Ucrania muestra en toda su decadencia a una izquierda sin objetivo y sin proyecto.”

Otro artículo de opinión del Huffington Post dedicado a Ucrania no es menos explícito al respecto:

Ucrania no es ni una zona de contención ni un estado satélite”: Otro artículo de opinión del Huffington en el que vuelve a ensalzar el Euromaidán y demonizar a Putin: “No podemos dar al presidente ruso lo que quiere: convertir a Ucrania una vez más en un Estado satélite de la Madre Rusia. Viktor Yanukovich (que gobernó entre 2010 y 2014) ya encauzó este plan. Ucrania conoció el capitalismo para amigos. Los manifestantes de Maidan querían una Ucrania democrática que pudiera salir de toda la corrupción enfermiza. La propaganda rusa parecía venir de la era soviética. Intentaron mostrar esta protesta popular como una conspiración fascista. Al final, los manifestantes consiguieron destituir a Yanukovich. En las elecciones de octubre de 2014, la extrema derecha perdió 31 de sus 37 escaños en favor del centro pro-europeo. Es este fantástico progreso el que Putin quiere negar por medio de la fuerza militar.” Pronto nos enteramos de la razón que se halla detrás de semejante línea editorial: a finales de 2009 George Soros financió con hasta 1’75 millones de dólares al Huffington Post. Creo que este dato es suficientemente significativo como para aclararlo todo.

GLOBAL VOICES

Global Voices fue otra página que en su día ayudó en cantidades ingentes a cimentar el carácter “progresista y pro-democrático” de las primaveras árabes, el 15M y Occupy Wall Street, lo que llevó a mucha gente a creer que este portal podía funcionar como verdadera herramienta de difusión de la izquierda antisistema… Pero, tristemente, y como ahora vamos a analizar con más detalle, parece que esta percepción cambió con el Euromaidán. Hay que hacer notar que la versión en español de Global Voices fue creada por el desarrollador de software español Chris Moya, quien también es cofundador de la emblemática página encargada de difundir el mensaje del 15M spainrevolution.com. Global Voices es el autor de la emblemática página “Spainrevolution” (no confundir con Spanish Revolution), dedicada a difundir y publicitar el mensaje del 15M y que en 2 años contó con más de 1.000 artículos publicados y 300 colaboradores. La página de Global Voices dedicada al 15M, “SpainRevolution”, promocionando a Gené Sharp, arquitecto de las “revoluciones de colores” que hoy asolan la estabilidad del mundo. Esto es lo que nos cuenta la Wikipedia de esta supuesta “oenegé independiente”: Global Voices es una red internacional de bloggers, traductores y periodistas ciudadanos que siguen, informe y resumen lo que está pasando en la blogosfera. Es un proyecto sin ánimo de lucro iniciado por el Centro Berkman para Internet y la Sociedad de la Escuela de Derecho de Harvard, que surgió de una reunión de bloggers internacionales celebrada en diciembre de 2004. La organización fue fundada por Ethan Zuckerman y Rebecca MacKinnon. En 2008 se convirtió en una organización sin fines de lucro independiente constituida en Amsterdam, Países Bajos, pero si buscamos las publicaciones de este portal supuestamente “independiente” con respecto al conflicto de Ucrania, encontraremos un surtido inmenso de entradas donde se ensalza a Euromaidán y a Kiev de manera casi obsesiva. No es cuestión de hacer un compendio de todas las entradas que Global Voices dedica a este conflicto, porque sería interminable. Sólo mostraremos algunas a título de ejemplo:

Les dejo aquí el enlace con todas las entradas referentes a “Ucrania” en Global Voices. Apuesto lo que quieran a que ustedes son incapaces de encontrar una sola en la que no se le vea el plumero a este portal “independiente y sin ánimo de lucro”: https://es.globalvoices.org/?s=ucrania+ Pero pronto descubrimos el secreto de Global Voices: abajo de cada página nos encontramos a sus patrocinadores, entre los que encontramos la Ford Fundation, Omidyar Network y, como no podía ser de otra manera, el Open Society Institute de George Soros.

PERIODISMO CIUDADANO

Periodismo Ciudadano es otra de las páginas supuestamente “independientes”, muy activa en difundir el mensaje del 15M, y perteneciente a la red de Global Voices. Es interesante observar que esta web, al igual que SpainRevolution, se ha encargado de promocionar la figura de Gene Sharp, el arquitecto de las revoluciones pacíficas al servicio de la CIA. También resulta muy didáctico analizar su posición con respecto al conflicto de Ucrania, con tendenciosos artículos en los que se habla de Yanúkovich como “presidente pro-ruso” y el Euromaidán como “revolución popular”, o promocionando la página “StopFake.org“, una web abiertamente pro-Kiev con el objetivo de desacreditar las informaciones del Kremlin con respecto a Ucrania. Queda por tanto, constatada la afiliación de esta web “indignada” con los intereses globalistas.

OPEN DEMOCRACY

De nuevo nos encontramos con otro portal “sin ánimo de lucro” dedicado a propagar el “buen mensaje” de las primaveras árabes, el 15M (incluido Podemos) y Occupy Wall Street. Y por qué no decirlo, también del golpe de Estado fascista del Euromaidán. Aquí tenemos, por ejemplo, un artículo en el que se se enfoca con una luz favorable el movimiento indignado en España:

Open Democracy: “15M: Hacia la democracia en tiempo real. Un año después de la revolución de los indignados en España, el movimiento 15M promueve soluciones novedosas para aumentar la participación democrática”.

Y es que a los amigos de Open Democracy se les cae la careta de “demócratas” cuando les toca hablar del conflicto de Ucrania: no sólo ensalzan el Euromaidán como una “revolución popular”, sino que se atrevieron a lanzar una sorprendente y delirante teoría según la cual, agárrense, detrás de los grupos neonazis en Kiev estarían nada menos que… agentes provocadores a las órdenes de Rusia.

Artículo de “Open Democracy” de diciembre de 2013 en el que se asegura que detrás de los grupos neo-nazis de Kiev se encuentran “agentes dobles” al servicio de Rusia.

Y de nuevo descubrimos el origen de esta aparente incongruencia: si hacemos click en el apartado “supporters” nos encontramos con la Ford Fundation, el Open Society y la Fundación Tides de George Soros.

ANONYMOUS

Habría que añadir a nuestra lista esta comunidad de Hackers que fue muy activa durante la primavera árabe, el 15M, Occupy Wall Street, las protestas de Venezuela y el Euromaidán, pero que curiosamente parece que dicha “hacktividad” decae bastante cuando los intereses globalistas no están por en medio. El caso del conflicto de Ucrania es revelador, con un casi unánime apoyo por parte de Anonymous en defensa de los manifestantes de Euromaidán, pero con un bagaje de hacktivismo muy escaso cuando se ha tratado de defender a la población de Donbáss de la agresión militar de los nazis ucranianos (a excepción de los CyberBerkut). Las acciones de “Anonymous” en Siria e Irán y más tarde en Venezuela y Ucrania, estuvieron en consonancia con el marco de las “revoluciones de colores”, que pretenden demonizar al régimen político vigente en el país y crear inestabilidad económica y social. Por supuesto, sabemos que en Anonymous colabora gente desinteresada e idealista, pero el hecho de que este colectivo no tenga líderes ni una cabeza visible (sino una estructura “horizontal” que, por cierto, nos recuerda mucho a la estructura interna de los manifestantes opositores de casi todas las revoluciones de colores), junto al hecho de que muchos de estos hacktivistas honrados tengan que compartir anonimato y colaborar con otros hackers, a los que ni siquiera pueden conocer, resulta ideal para las inflitraciones de elementos de cualquier tipo, y nos hace concebir legítimas dudas sobre si en momentos determinados, este colectivo está siendo manipulado (muchas veces incluso sin saberlo) por algún poder globalista en la sombra. De todas formas parece un hecho que la actividad y presencia de Anonymous aumentan exponencialmente durante todas las revoluciones de colores de los últimos cinco años.

WIKILEAKS

Wikileaks desarrolla una versión no censurable de Wikipedia para la publicación masiva y el análisis de documentos secretos (“Leaks”), manteniendo a sus autores en el anonimato. (leaking hacer pública alguna información sin contar con autorización o aprobación oficial, a pesar de los esfuerzos para mantenerla en secreto): Nuestro principal interés se centra en los países con regímenes totalitarios como China, Rusia, Eurasia Central, el Próximo Oriente y África Subsahariana. No obstante nosotros cooperamos también con todos aquellos que quieran desvelar comportamientos no éticos por parte de sus gobiernos y empresas. Así se describe a sí misma Wikileaks en su web oficial, otra “organización independiente y sin ánimo de lucro” que lucha desinteresadamente por la justicia en el mundo. Ya empieza a llamarnos la atención que califique de “totalitarios” y nombre expresamente a gobiernos no alineados con los podres globalistas, como Rusia o China, pero que, no obstante, se niegue a mencionar a Arabia Saudí, un país en el que todavía hoy sugerir públicamente que habría que manifestarse contra el gobierno supone la condena a la pena de muerte. Su lider Julian Assange, considerado el “mártir de la libertad de expresiónpor la prensa globalista, se encuentra actualmente en la embajada de Ecuador en Londres. Pero, ¿qué ha desvelado hasta ahora Wikileaks que no supiéramos? ¿Acaso su labor ha conseguido derrocar a algún gobierno en Occidente? ¿Ha rebajado la popularidad de Obama? ¿Qué, excepto las incontables denuncias de espionaje por parte de Estados Unidos a sus aliados, algo de lo que se sospechaba desde hace mucho tiempo? Webster Tarpley, historiador, economista, escritor, periodista, conferenciante y crítico de las políticas internas y foráneas de los Estados Unidos, escribió lo siguiente en uno de sus artículos sobre Wikileaks:

Es esclarecedor que ninguno de los vertederos de documentos de Assange hayan revelado ningún escándalo notable que implicase a Gran Bretaña o Israel. No hay figuras públicas estadounidenses que hayan tenido que renunciar a su cargo por nada que Wikileaks haya revelado. Ni ninguna la gran operación encubierta en curso haya provocado que algún agente de alto rango o influencia se haya visto salpicado. Después de todos estos meses, todavía no hay acusaciones de Estados Unidos contra Assange, a pesar de que sabemos que un gran jurado podría acusar fácilmente hasta a un sándwich de jamón si el Fiscal Federal lo exigiese. Si la CIA hubiese querido silenciar a Assange, podrían haberlo sometido al secuestro clásico (aka “rendición”), lo que significaría que habría sido golpeado, drogado y lo habrían arrastrado al extranjero, a despertar en una prisión en algún lugar oscuro en Egipto, Polonia o la Bahía de Guantánamo. De lo contrario la CIA podría haber recurrido al trabajo restringido extralegal habitual [eufemismo de asesinato]. También debemos asumir que el nuevo cyber-comando de EEUU., con sus vastos recursos, no tendría problemas para cerrar los sitios-espejo de Wikileaks, no importa qué tan numerosos sean. Lo mismo ocurre con Anonymous y otras organizaciones que acompañan a Wikileaks. Sin embargo, estas consideraciones son puramente fantásticas. Assange emerge hoy como el niño mimado y chico de oro de The New York Times, Der Spiegel, The Guardian, El País (en fin, de todo los medios oficiales angloamericanos. Él descansa hoy en el esplendor señorial de la casa de campo de un bien conectado oficial británico retirado, el cual debe ser interrogado por los medios de comunicación acerca de sus vínculos con la inteligencia británica. El mundo radical-chic, desde Bianca Jagger hasta Michael Moore, está a los pies de Assange”. Julian-Assange-portada-time: publicación globalista “TIME” ensalzando al “mártir” Assange.

Pero esta actitud bastante inofensiva e inocua de Wikileaks con respecto a los gobiernos occidentales contrasta con lo crucial y decisiva que fue su actividad durante el gérmen de las primaveras árabes, como hace constar el propio Webster Tarpley, en otro de sus brillantes artículos publicado el 16 de enero de 2011: “Túnez es quizás el primer caso en que Assange y Wikileaks pueden hacer una reclamación creíble para haber detonado el golpe. La mayoría de los informes de prensa coinciden en que ciertos cables del Departamento de Estado, que eran parte de la última filtración de documentos de Wikileaks y que se centraron en el exceso sibarita y lujoso del estilo de vida del clan Ben Ali, jugaron un papel clave para lograr que la pequeña burguesía tunecina saliera a las calles. Gracias en parte a Assange, las cadenas de televisión occidentales eran así capaces de mostrar imágenes de las multitudes tunecinas sosteniendo carteles que decían “¡Sí se puede!” en lugar de unas más realistas y populistas de “¡los precios de los alimentos están condenadamente demasiado altos!” Ben Ali había estado en el poder durante 23 años. En Egipto, el presidente Mubarak ha estado en el poder durante casi 30 años. El clan Assad en Siria también ha existido por cerca de tres décadas. En Libia el coronel Gadafi ha estado en el poder desde hace casi 40 años. Hafez Assad fue capaz de diseñar una sucesión monárquica a su hijo cuando murió hace 10 años y Mubarak y Gadafi están tratando de hacer lo mismo hoy. Desde los EEUU no se quiere que estas dinastías permanezcan. La táctica obvia de la CIA es desplegar activos como Twitter, Google, Facebook, Wikileaks, etc., a su vez miembros clave de la población joven en las multitudes que pululan para derribar los regímenes gerontocráticos. Judy Bachrach, en su artículo de agosto de 2011 publicado en World Affairs sobre las primaveras árabes, reconocía el papel clave que jugó Wikileaks en las “revoluciones espontáneas” del mundo árabe. He aquí algunos extractos de su artículo:

  • En el mundo musulmán, en otras palabras, no son sólo las mujeres quienes a menudo, tradicionalmente andan cubiertas por un velo. Lo es, o más bien lo solía ser, la información. En Yemen, Egipto y Siria, en Bahrein y Libia, ese velo ha sido levantado ahora, para bien o para mal, no sólo por los vendedores de frutas, los extremistas musulmanes, los valientes abogados o incluso los jóvenes rebeldes, sino también por WikiLeaks. En Egipto el combustible adicional llegó a principios de diciembre, cuando Simon Tisdall, del periódico The Guardian, recibió pronto alrededor de 250.000 documentos de WikiLeaks, dijo a sus lectores que de acuerdo a los cables confidenciales escritos por Margaret Scobey, el embajador estadounidense en El Cairo, Mubarak, preferiría morir en la oficina antes que dimitir. “Las próximas elecciones presidenciales están programadas para el 2011 y si Mubarak sigue vivo es probable que se postulará de nuevo e, inevitablemente, ganará”, escribió Scobey.

  • (…)

  • Dos meses después de que que The Guardian publicase los cables de WikiLeaks sobre Egipto, Mubarak huyó de El Cairo.

  • (…)

El editor de The New York Times, Bill Keller, dio a WikiLeaks su parte de gloria cuando, durante una discusión sobre Túnez con Terry Gross, le dijo, “Hemos rastreado la familia del chico que se inmoló… Pero también parece ser cierto que la circulación de los documentos de Wikileaks que hablaban de cómo el régimen de Ben Ali vivía como reyes… claramente se hicieron circular ampliamente y si bien eso no ha iniciado lo que ocurrió en Túnez, no cabe duda de que lo ha alimentado”.

  • También parece que Wikileaks ha sido decisivo en la desestabilización de Siria, otro país en el punto de mira de las élites globalistas, como señala Jorge Capelán en su artículo: El jueves, un hecho cambió dramáticamente el curso de los acontecimientos en lo relacionado con la solicitud de asilo político en el Ecuador del australiano Julian Assange, fundador del grupo WikiLeaks. Se trata de la revelación, por parte del grupo, de más de 2 millones de correos electrónicos tomados de diferentes instituciones del gobierno sirio. Siria actualmente está sometida a una guerra criminal por parte de la OTAN, de Israel y del Consejo de Cooperación del Golfo con el nada original pretexto de combatir un “régimen dictatorial” (…) En este contexto la revelación de esos cables por parte de WikiLeaks se convierte en una abierta intervención en esta guerra favoreciendo al bando de la OTAN, con el pretexto de ofrecer información que permita una comprensión mas profunda de los hechos. Para la liberación de esos cables, WikiLeaks ha solicitado la cooperación de un grupo de mass media del Medio Oriente, Europa y los EEUU, que comprende los periódicos y agencias noticiosas Al Akhbar (Líbano), Al Masry Al Youm (Egipto), ARD (Alemania), Associated Press (EEUU), L’Espresso (Italia), Owni (Francia) y Publico.es (España). La mayoría de esos medios sirven a la guerra mediática comandada por la OTAN.

El presentador Glenn Beck aseguró en la cadena norteamericana Fox que el entonces abogado británico Mark Stephens, que representa a Assange, también trabajaba para la fundación Open Society (a través de Solicitors for Pro Bono Group y la Fundación Tides), cuyo fundador y dueño es George Soros.

Pero para estar un tanto informados de cómo la élite globalista se vincula con Julian Assange basta recordar los siguientes acontecimientos:

Julian Assange recibe el premio Index on Censorship de la revista The Economist el año 2008. (Dos periodistas de The Economist fueron invitados a la reunión 2010 del Grupo Bilderberg en España: Vendeline Bredow y Adrian D. Wooldridge)

Wikileaks desclasifica los cables y hace entrega de estos secretos, extrañamente, a los siguientes medios de información famosos mundialmente: El País (España), Der Spiegel (Alemania), Le Monde (Francia), New York Times (Estados Unidos) y The Guardian (Reino Unido). Y si se investiga un poco os daréis cuenta de que justamente la mayor parte de los directores de estos medios de información, forman parte de le élite que controla el globo y prácticamente todas sus comunicaciones:

1. El País (España) –Grupo PRISA– Juan Luis Cebrián (miembro Bilderberg).

2. New York Times (Estados Unidos) Arthur Ochs Sulzberger Jr (CFR).

3. Der Spiegel (Alemania) Mathias Müller von Blumencron y Georg Mascolo (vinculados al sector de los servicios de Inteligencia y a la derecha política)

4. The Guardian (Reino Unido) Alan Rusbridger (presente en las reuniones Bilderberg a través de su periodista Charlie Skelton).

5. Le Monde (Francia) Grupo Le Monde (controlado por el Grupo PRISA español), Éric Fottorino y Sylvie Kauffmann (Sylvie pertenece a la French American Foundation (FAF) con estrechos vínculos con el CFR).

AMNISTÍA INTERNACIONAL

La descripción de esta ONG que podemos consultar en la Wikipedia es la siguiente: Amnistía Internacional, comúnmente conocida como Amnistía o AI (en el original inglés Amnesty International) es un movimiento global  presente en más de 150 países y que trabaja para que los derechos humanos, reconocidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos aprobada en 1948 y en otros tratados internacionales, como los Pactos Internacionales de Derechos Humanos, sean reconocidos y respetados. Amnistía cuenta con más de 7 millones de miembros y simpatizantes en todo el mundo. El objetivo de la organización es «realizar labores de investigación y emprender acciones para impedir y poner fin a los abusos graves contra los derechos civiles, políticos, sociales, culturales y económicos» y pedir justicia para aquellos cuyos derechos han sido violados. Hasta aquí todo muy noble, se trata de una organización sin ánimo de lucro e “independiente” que lucha “por la justicia social” y demás…

Ahora veamos cómo ha enfocado AI el conflicto de Ucrania, por ejemplo, a través de sus representantos que en su día se dedicaron específicamente a cubrir los eventos del Euromaidán: La dispersión violenta de los manifestantes concentrados en la plaza de la Independencia (Maidan), en el centro de Kiev, la madrugada del sábado revela un vergonzoso desprecio por el derecho de las personas a manifestarse pacíficamente; así lo ha afirmado Amnistía Internacional. La organización ha pedido que se lleve a cabo sin demora una investigación independiente y efectiva sobre las denuncias de uso excesivo de la fuerza por parte de los agentes de la policía antidisturbios “Berkut”. “Al decidir esta mañana temprano dispersar violentamente a los manifestantes, las autoridades ucranianas han vulnerado las mismas normas y valores a los que aspiran según sus declaraciones”, ha afirmado Heather McGill, investigadora de Amnistía Internacional sobre Ucrania.

Lo de “manifestarse pacíficamente” es curioso, cuando menos, visto el grado de violencia y fanatismo empleado por los manifestantes. También hay un vergonzoso desprecio, utilizando las propias palabras de Amnistía, por el derecho de las personas, incluidos los policías, a no ser agredidos brutalmente, como lo fueron.

La organización, Amnistía, pide una “investigación independiente y efectiva sobre las denuncias de uso excesivo de la fuerza por parte de los agentes de la policía antidisturbios”, pero no se solicita tal investigación para el uso de la violencia, extrema, por parte de los alborotadores.

Imagínense estas declaraciones de Amnistía si esta violencia la hubiesen desarrollado manifestantes en Pamplona, en Madrid o en cualquier lugar de lo que ahora se llama Israel. Jamás hubiesen hecho esto, bien al contrario, hubiesen condenado con dureza las agresiones a la policía y hubiesen, además, justificado su actuación.

Sigue esta organización “humanitaria” financiada por las corporaciones con su discurso:

De acuerdo con las normas internacionales de derechos humanos, no está permitido imponer restricciones del derecho a la libertad de reunión salvo en caso de ‘necesidad social acuciante”.

Bueno, la violencia desatada por los manifestantes parece no parecerle a Amnistía una “necesidad social acuciante” Además, la ocupación de edificios de la administración, como el propio ayuntamiento, generó importantes problemas: El alcalde de Kiev, Alexander Popov, ha pedido a los manifestantes que ocupaban el edificio de la administración de la ciudad: “dejar a los empleados trabajar con normalidad por la ciudad, sus ciudadanos y visitantes”. Popov advirtió que bloquear el trabajo de la admnistración puede ocasionar “retrasos en los pagos a los empleados públicos, escasez de alimentos, de agua, de electricidad y de calefacción” y puede interrumpir el trabajo de hospitales, escuelas y guarderías. De acuerdo a las normas internacionales, a la justicia y al sentido común, desde luego que era necesario poner fin a todo este tipo de violencia.

En todo el comunicado, y no hay comunicados posteriores, porque se ha tomado de la página de Amnistía el 3.12.13 a las 23.41 h, no hay ninguna referencia por parte de Amnistía Internacional a la violencia de los manifestantes, a esta ocupación de edificios públicos y obstaculización del trabajo de la administración, a la abundante presencia de elementos neonazis y al respeto por el deseo de la mayoría de los ucranianos, que no están por la labor de seguir lo que quieren las corporaciones occidentales.

También llama la atención que Amnistía Internacional no defienda las protestas, estas sí muy populares, en Tailandia, donde quienes dirigen el país han amenazado con disparar a matar a los manifestantes. La razón es que los dirigentes, completamente corruptos, son favorables al poder económico occidental.

El papel de Amnistía Internacional, como el de los medios de comunicación, vuelve a ser claro: utilizar los derechos humanos o la supuesta libertad de expresión para, falsificando los hechos, favorecer los intereses del poder económico occidental.

Tony Cartalucci, el experto analista político estadounidense, recuerda que Amnistía Internacional recibe financiación del Open Society Institute de George Soros, además del Departamento para el Desarrollo Internacional de Gran Bretaña y de la Unión Europea. Demasiados intereses y demasiados vínculos al mundo del poder y de las corporaciones como para esperar justicia y ecuanimidad en sus actuaciones

  • ¿Por qué los altos cargos de AI son ex-trabajadores del Departamento de Estado de EEUU, de la CIA o millonarios sionistas o pro-sionistas?

  • Suzanne Nossel, Directora Ejecutiva de Amnistía Internacional sección EEUU y antigua empleada de Hillary Clinton, trabajó bajo las administraciones de Bill Clinton y Barack Obama

  • ¿Por qué AI tiene una doble estándar para medir las denuncias de violación de Derechos Humanos cuando se trata de atroces agresiones cometidas por ciertos países occidentales (EEUU/OTAN) e incluso los justifica y/o ignora mirando para otro lado?

  • ¿Por qué AI favorece con sus informes previos las guerras contra países islámicos que se oponen a las pretensiones de control y sumisión de occidente (EEUU/OTAN)?

  • Caso Libio: “…(AI) sí aprobó la actuación de Naciones Unidas en Libia y lo hizo amparándose en datos falsos, como hemos visto en el capítulo sobre los medios de comunicación. Gadafi no bombardeo ni atacó a la población civil, no había motivos para ninguna intervención militar. Y no debe de olvidar AI que esa Responsabilidad para Proteger, elaborada en 2005, no está en la Carta de las Naciones Unidas, porque es un cajón de sastre que puede valer, como ha valido en Libia, para arruinar a un país y condenarlo a la represión y muerte real ejercida por los islamistas y a la explotación colonial exterior…”

  • Caso Sirio: “…(AI) culpabiliza de las muertes de civiles a las fuerzas de seguridad sirias y no habla para nada de los extremistas islámicos que han entrado en el país, que como bien debe saber AI están extendiendo el terror y causando estragos en la población civil. Tampoco dice nada sobre que ya, hacia finales del año 2011, más de 2.000 muertos eran de las propias fuerzas de seguridad sirias, algo llamativo. Si hubiese 2.000 soldados israelíes muertos en una lucha con los palestinos ¿qué pasaría? ¿qué no se justificaría para aprobar las acciones militares de Israel?… mejor no preguntarlo, porque con tan solo dos o tres soldados israelíes muertos se justifican bombardeos que matan a millares de civiles.

  • ¿Por qué AI no pide ni propicia una intervención internacional ante las claras acciones de vulneración de Derechos Humanos de las dictaduras totalitarias y nada democráticas de los países del Golfo, socios de EEUU e Israel, como Arabia Saudí, Qatar, Bahrein…?

  • ¿Qué legitimidad tienen estas dictaduras y Amnistía Internacional para apoyar guerras en nombre de la democracia y por qué Amnistía Internacional es cómplice de estas dictaduras totalitarias en los claros crímenes de guerra de agresión que han emprendido en Oriente Medio?

  • ¿Por qué AI iguala a verdugos y víctimas en las claras agresiones de distintos actos ilegales cometidos por EEUU, Israel y/o la OTAN, como por ejemplo en la operación terrorista y genocida “Plomo Fundido” de Israel contra Palestina?

  • ¿Por qué Amnistía Internacional no denuncia y sí manipula los datos de la agresión que cometió la OTAN contra Libia?

  • ¿Por qué Amnistía Internacional sigue apoyando, sin denunciar, las mentiras (armas químicas que nunca aparecieron) que justificaron el genocidio en Irak y además no denuncia ni promueve acciones legales contra este y otros genocidios cometidos por EEUU, Israel y la OTAN?

  • ¿Por qué AI miente en sus informes de las guerras de EEUU/OTAN permitiendo que sirvan las excusas para originarlas y luego denuncia algunas consecuencias para aparentar que está defendiendo los Derechos Humanos?

  • ¿Por qué AI sigue utilizando las falsas e hipócritas “razones humanitarias” de “proteger a la población”, cuando es justo que con esta excusa se cometieran genocidios como el que la OTAN y sus terroristas de Al-Quaeda cometieron en Libia contra civiles (de miles de niños, niñas, hombres, mujeres y ancianos)?

  • ¿Por qué AI no denuncia y promueve acciones legales contra las agresiones de EEUU/OTAN/Israel en las que se está usando armamento prohibido internacionalmente como las bombas de racimo, bombas con residuos radioactivos, drones… contra la población civil?

  • ¿Por qué una organización que se llama a sí misma de “defensa de los Derechos Humanos” apoya y favorece las intervenciones militares y las guerras, cuando sabe que cualquier crimen de guerra, de agresión o genocidio es totalmente ilegal?

Todas estas legítimas preguntas tendrán respuesta en un futuro no tan lejano. Por cierto, el co- fundador de Amnistía Internacional en Barcelona fue Francisco Polo, un personaje al que investigaremos más adelante en este dossier.

NACE UN NUEVO FENÓMENO MUNDIAL: “LOS INDIGNADOS”

Uno de los aspectos más controvertidos de Occupy Wall Street es la siguiente paradoja: parece que este movimiento tuvo más impacto en el extranjero que en el propio EEUU, lo que nos lleva a pensar que fueron los medios quienes se encargaron de “globalizar” un fenómeno social, que si no llega a ser por su labor habría pasado bastante desapercibido. Claro que algo similar podríamos decir del 15M: no son pocos los que se preguntan cómo es posible que unas protestas que supuestamente se enfocaban contra el sistema, acabasen acaparando tanta cobertura mediática por parte del propio sistema. Es obvio que en el 15M había mucha gente bienintencionada, pero ¿quiénes dieron la consigna y la luz verde mediática de la que disfrutan los “indignados”? Tanto el Washington Post (Donald E. Graham, Marcus W. Brauchli) como el New York Times (Jill Abramson, Arthur Ochs Sulzberger Jr, Michael Golden) pusieron mega-portadas sobre la “Spanish Revolution”. Luego, “Le Figaro” y “London Times” se hicieron eco. ¿Se jugarían el tipo los medios de comunicación del gran capital prestamista dándole publicidad y bombo a un movimiento que supuestamente va en contra de él? Cuando un grupo ataca con particular efectividad los cimientos de la plutocracia internacional, se le ataca, bombardea, encarcela, ilegaliza, asesina, etc. Como mínimo, se le somete a un silencio mediático (como hacen los medios de comunicación estadounidenses con el congresista y candidato presidencial Ron Paul). Con el 15M, no ha sido el caso. Al final los medios se salieron con la suya: las protestas del 15M lograron un apoyo social que rozó el 80% de la población, una cifra récord que ningún partido político ha conseguido hasta el momento en la historia de la democracia española, mientras que un 54% de los norteamericanos mostraron sus simpatías por el movimiento Occupy Wall Street, lo que no está mal para un población que, la verdad sea dicha, tampoco mostró mucho entusiasmo en movilizarse. Y efectivamente, de golpe y porrazo empezamos a comprobar que comienzan a crearse diferentes manifestaciones e incluso franquicias “Occupy” en diferentes lugares del mundo, por ejemplo ya en el mismo año 2011 en Kiev.

Por cierto, sorprende mucho ingresar en las páginas de Facebook dedicadas a Occupy Ukraine y Occupy Russia y observar a tráves de los posts publicados en las fechas de finales de 2013 y principios de 2014, cómo estos grupos se muestran incondicionalmente favorables al Euromaidán:

Los medios de comunicación digitales, incluyendo medios supuestamente “alternativos”, cumplen aquí también una labor importante. A partir de los eventos del 15 de Octubre se empieza a hablar de los “indignados” como un movimiento global. Como por arte de magia y con la venia de los medios globalistas, empiezan a surgir “indignados” (protesters) en lugares tan dispares como Venezuela, Siria, Ucrania, Rusia, Bielorrusia o Hong Kong… Países cuyos gobiernos, curiosamente, mantienen una dura pugna contra los poderes globalistas…

El “indignado” (The protester) se convirtió en el año 2011 en “la persona del año” para revistas pro-globalistas como TIME.

¿Cómo, si no, se habría podido movilizar a la opinión pública mundial en favor de elementos opositores tan dispares como los radicales islamistas, que luchan contra Assad en Siria, los extremistas filonazis de Ucrania o la oposición pro-occidental en los países asiáticos? Creando un movimiento “Occupy global“, producto directo de los medios globalistas, con un mensaje tan ambiguo y anodino como el de la “no violencia” y la “lucha por la democracia”.

El caso de Ucrania es sin duda el más esperpéntico, dado el claro componente extremadamente violento, ultranacionalista e incluso fascista que lideró las protestas, sobre todo en su parte más decisiva.

Pero resulta aterrador comprobar que, cuanto más se evidenciaba que el elemento extremista y filonazi (liderado por Svoboda y Pravy Sektor, con un discurso muy próximo al hitleriano) se apoderaba de las manifestaciones, inundándolas de violentos jóvenes que enarbolando esvásticas, cócteles Molotov e incluso armas de fuego y estaban dispuestos a todo, incluso a matar, tanto más se empeñaban los periodistas en llamarlos “indignados”. Por supuesto, nada de esto se debía al azar, sino que se trataba de una campaña perfectamente coordinada desde el principio.

Podemos repasar sólo algunos ejemplos de “nuestra prensa libre”.

Y hay muchos más ejemplos. Tremendamente revelador: para los medios pro-globalistas en Kiev no había nazis, sino sólo indignados al estilo “Occupy”… Es más, parece que esa manía se suele cortar de raíz cuando quienes protestan no están alineados con los intereses globalistas. Así ningún medio occidental habló de “indignados”cuando en Crimea y el este de Ucrania la gente se movilizó a través de protestas multitudinarias, contra el nuevo e ilegítimo gobierno que se instaló en Kiev tras el golpe de Estado conocido como “Euromaidán”… Curioso este club de los “indignados”, entre los que pueden tener perfecta cabida incluso los Neonazis, pero no aquellos que están a favor de Rusia y por tanto contra los poderes globalistas. Otra evidencia que confirma que nada de lo que hemos expuesto se debe a la casualidad.

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