El Doctor Ryan Cole, formado en la Clínica Mayo y que dirige el laboratorio de pruebas independientes más grande e importante de Idaho, saltó a la opinión pública cuando el Estado de Idaho, en 2021, formó el grupo Capitol Clarity para contar los hallazgos e investigaciones de las timo-vacunas. Sus vídeos han sido censurados por Youtube, propiedad de Google, por el mero hecho de contar la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad. El Doctor Ryan Cole ha dado la voz de alarma del aumento exponencial en 20 veces de cánceres de endometrio, así como numerosas enfermedades autoinmunes, melanomas, herpes, mononucleosis… El Doctor Ryan Cole, en su última investigación hecha pública, afirma que en las autopsias de muertos a causa de las timovacunas no hay ni una molécula de grafeno, ni rastro de óxido de grafeno. La secta destructiva del grafeno sufre así un duro mentís al más alto nivel. La mortalidad no está provocada por el grafeno, que ni siquiera aparece, sino por el efecto patógeno de la proteína spike. Es duro que te desmientan tan rotundamente cuando formas parte de una secta y esa es lo que ha sucedido: se ha conformado la secta destructiva del grafeno. Destructiva, pues ha buscado y en parte conseguido, la división de los no vacunados, quitándoles, por ejemplo, la fuerza que da la unidad para exigir responsabilidades a los autores del genocidio o para exigir comisiones de investigación que depuren esas responsabilidades. Ha llegado el momento de dar el stop a este desquicie irracional que parece actuar a favor de los enemigos globalistas.
Operación de los servicios de inteligencia franceses
La secta destructiva del grafeno nació en Argentina, como operación de los servicios de inteligencia franceses, con esa doble finalidad de división y descrédito de la resistencia. Respecto a la conspiración del grafeno, fuentes argentinas de toda solvencia nos cuentan que nació de los servicios de inteligencia franceses y fue mediada (con conocimiento de causa o no) por el sr Germán Sarlange, un francoargentino con conexiones con oficiales de la inteligencia francesa (como puede comprobarse en el documental Big Reset) y por el médico Jose Luis Sevillano, empeñado en achacar el síndrome Covid a las antenas 5G. Sarlange, a través del médico argentino Luis Marcelo Martínez, que había ganado popularidad por sus videos en 2021 y muy amigo de Ricardo Delgado (La Quinta Columna) propició la conspiración del grafeno, que fue sustentada de forma pseudocientífica por los informes equívocos del profesor Pablo Campra, de la Universidad de Almería. Se formó un grupo (anónimo) llamado The Scientist que realizó un embrollado informe dando por hecho que las vacunas contenían grafeno, pero sin demostrarlo.
Todo esto fue elevado al paroxismo de la elucubración, afirmando que en las vacunas había nanocircuitos autoensamblables de grafeno para control remoto de los inoculados, a través de un blog llamado Corona2Inspect, elaborado por un perfil falso llamado Mik Andersen, que hizo un par de videos sin mostrar su rostro ni su voz, que fue citado por Pablo Campra en su informe sobre el supuesto grafeno en las vacunas y que una vez que ha generado el embrollo ha desaparecido convenientemente para no poder ser rastreado.
Pablo Campra.
Pablo Campra realizó un muestreo de señales espectrales de vibración RAMAN que, asociadas a imágenes de microscopia óptica acoplada a los espectros, permita determinar la presencia de derivados de grafeno en muestras de vacunas COVID19 comercializadas bajo cuatro marcas diferentes. Se han analizado más de 110 objetos visibles al microscopio óptico, con apariencia compatible con estructuras de grafeno. De ellas identifica 8 con óxido de grafeno. Sin embargo el mentís de la investigación del Doctor Ryan Cole no deja lugar a la duda: no hay grafeno en los muertos a causa de la vacunas ni nunca lo ha habido. la secta destructiva del grafeno ha recibido un golpe de muerte del que ya no levantará cabeza.
Enrique de Diego (07/10/2022) STOP A LA DESTRUCTIVA SECTA DEL GRAFENO (2): La demolición de La
Es una afectada por los efectos adversos (más bien por los efectos buscados): “He visto citar lo del grafeno como curiosidad, me han parecido muy exaltados”. La secta destructiva del grafeno no ha hecho más que daño y mal, ha generado confusión. Los principales responsables de esta estafa monumental, sin base científica alguna, son los componentes del programa en internet de sospechoso nombre, “La Quinta Columna”. Durante este tiempo Rambla Libre no ha querido entrar en la superchería, conscientes de como dice Andreas Kudwig Kalcker (la autoridad máxima en clorito de sodio, que ha salvado miles de vidas): el programa La Quinta Columna “no tiene ningún rigor académico”. Ricardo Delgado y José Luis Sevillano se han arrogado el papel de gurús y desde ese inconsistente pedestal se dedican a lanzar anatemas fatuos a quien no les baila el agua y no está dispuesto a seguir su desquicie, para descerebrados y enanos mentales.
Pero llevan más de un año haciendo directos, martilleando casi a diario todos estos disparates, y han conseguido que buena parte de la disidencia (la más inculta y sin ningún conocimiento biomédico) los siga, de manera que no haya un número suficiente de personas que puedan unir sus fuerzas contra las timovacunas para que podamos ser escuchados. Con unos infumables vendidos: 1er Informe Técnico Final de Detección de Grafeno en Vacunas Covid y 2o Informe de Toxicidad del Óxido de Grafeno… que producen risa, que producen la irrisión de los auténticos científicos y que han sido desmentidos por los estudios del Doctor Ryan Cole, una auténtica eminencia, formado en la clínica Mayo y con el mejor laboratorio de Idaho, que dictaminan que en las autopsias de los fallecidos a causa de la vacuna no se ha encontrado ni rastro de grafeno ni de óxido de grafeno. Con un docente de medio pelo de una universidad sin prestigio alguno, montando estafas mentales para generar una secta que se hunde en el descrédito. Y lo peor de todo es que Ricardo Delgado es un individuo agresivo, rayando en la violencia verbal, que insulta a personas de indudable prestigio, que se lo han jugado todo por ética superior y han salvado miles de vidas, como la Catedrática María José Martínez Albarracín, con la que demuestran tener una neurosis obsesiva, una auténtica fijación, pero también con la Doctora Natalia Prego o la Doctora Almudena Zaragoza, personas de grandes merecimientos, referencia de Médicos por la Verdad, que con nombre y apellidos las llama prostitutas y criminales y alentando a sus seguidores a que las agredan. Dice que no descansará hasta que no las ahorquen en la plaza pública. Según ha podido saber Rambla Libre, ésta búsqueda de protagonismo garrulo, mostrenco y de baratillo, por personas sin ningún conocimiento, sin ningún estudio, que va de algo esotérico como bioinformático, con un cursillito, va a terminar en los Juzgados, muy pronto y se les va a caer el pelo a los mamarrachos y mamelucos, por lo que se está en proceso de recopilar pruebas para denuncia judicial.
Enrique de Diego (08/10/2022) STOP A LA DESTRUCTIVA SECTA DEL GRAFENO (y 3): Pablo Campra, un informe deficiente hecho de encargo
La secta destructiva del grafeno ha conseguido un tiempo sus objetivos: dividir a los no vacunados, protagonizar agresivas campañas de descrédito contra personalidades intachables que han dado la batalla poniendo en juego su prestigio personal, su futuro. Pero ya le ha llegado su hora. El Doctor Ryan Cole les ha asestado un golpe de muerte del que no levantarán cabeza. Es el final de La Quinta Columna, que ha inflado su protagonismo y se viene abajo como un soufflé, como el bluf que siempre han sido.
Rambla Libre no ha entrado hasta el momento en esta patochada irracional en aras a mantener la unidad del movimiento anti timovacunas, pero las agresiones enloquecidas a personas por las que sentimos todo el respeto y la admiración nos han llevado a no callar por más tiempo y poner las cosas en su sitio: La Quinta Columna en el sumidero de la Historia.
Toda La secta destructiva del grafeno se ha montado en torno a Pablo Campra, financiado por La Quinta Columna. No es el suyo un estudio independiente, porque quien paga, manda. Tampoco, como dice la Catedrática María José Martínez Albarracín, es un estudio concluyente. A nosotros, en Rambla Libre, nos parece una mierda pinchada en un palo.
Recuperamos este texto de la Catedrática María José Martínez Albarracín, una científica encomiable y de ética probada, publicado en Madrid Market, donde desmonta el informe de Pablo Campra:
Catedrática María José Martínez Albarracín.
“El sr Campra se considera únicamente un analista y se desmarca de la secta grafenera: no le gusta que lo asocien con la mitología que se ha montado en torno al grafeno. Sin embargo debería darse cuenta de que él ha sido el referente científico de la misma, en quien todos se han apoyado para delirar y si bien es verdad que en sus informes escritos es cuidadoso, con sus vídeos ha alimentado, precisamente, esa mitología, dando la razón a La Quinta Columna y sus disparates. También ha promovido el sr Campra la difusión (lo hace en su propio informe definitivo pag. 12) del blog https://corona2inspect.blogspot.com, un perfil falso de libro supuestamente llamado Mik Andersen, que hizo algunos vídeos sin mostrar nunca su cara ni su voz y que actualmente está desaparecido. Este blog publicaba verdaderos mitos y especulaciones sobre nanocircuitos y nanorouter incluidos en las vacunas Covid, que han dado pie a otro mito indemostrado: el de las emisiones MAC de los vacunados. “A pesar de que apenas he hablado públicamente sobre el tema, sólo si se me ha preguntado directamente, la secta grafenera ha hecho estandarte de mí como su enemigo público nº1 y hasta se me ha acusado de estar empeñada en desacreditar todo lo referente al grafeno. Yo nunca he hablado mal de Pablo Campra, únicamente he hecho algún comentario sobre lo que opino de sus informes, porque igual que el Sr Campra está en todo su derecho de investigar lo que le parezca oportuno, los que tenemos suficientes conocimientos científicos al respecto estamos también en nuestro derecho de opinar con educación y rigor. “Respecto al informe preliminar del Sr Campra sólo puedo decir que es equívoco y no concluyente, pero eso ya lo dice él mismo y ha sido además ”desmenuzado” por la periodista de investigación Witney Webb. “Respecto a su segundo, informe, titulado “Detección de grafeno en vacunas Covid 19 por espectroscopía micro-Raman”, siempre he dicho que era un informe serio y bien hecho, aunque vuelve a ser equívoco. Y es equívoco por varias razones que voy brevemente a enumerar: 1ª) Toma como algo específico del grafeno la emisión Raman de los enlaces Sp2, (banda G pag 6), cuando este enlace se encuentra igualmente en el colesterol y sabemos que las nanopartículas lipídicas de las vacunas de ARN contienen colesterol. 2ª) Habla de ocho objetos (pag 10), semejantes al patrón utilizado, de oxido de grafeno reducido, que presenta tres picos. Pero de esos ocho objetos, según Campra inequívocos, solo uno tiene los mismos tres picos que el patrón (el objeto Pfizer nº 3) 3º) Habla de identificación concluyente de estos ocho objetos, pero al mismo tiempo dice que hay una alta probabilidad de que se trate de óxido de grafeno (pag 10) 4ª) Estos ocho objetos, en realidad ocho briznas, están distribuidos aleatoriamente entre siete viales, cuatro de los cuales estaban sellados (pag 19), no se puede descartar que las briznas grafíticas puedan proceder de los tapones. 5ª) El procesamiento realizado de las muestras es complejo, implicando mucha manipulación (pag 8), por lo que a pesar de que se hayan tratado cuidadosamente, no se puede descartar una posible contaminación exógena. Resumiendo, si bien es verdad que estas ocho partículas de ¿polvo? son carbonáceas (según el M.O.) y compatibles con grafito o grafeno por sus espectros, no hay una homogeneidad en las muestras que indique su posible procedencia de la vacuna, apuntando más bien al exterior durante el manipulado en la fabricación o en el análisis y aun suponiendo que estuvieran en la vacuna, una brizna de unas pocas micras inoculada por vía intramuscular no llegaría ni a los ganglios linfáticos, ya que el grafito y el grafeno son biodegradables y en ese tamaño pueden ser fagocitados y destruidos por los leucocitos. Por tanto es del todo descabellado suponer que pudieran causar la más mínima perturbación fisiopatológica. Por otra parte hace poco se ha publicado un informe preliminar de un equipo internacional liderado por doctores alemanes, en el que utilizando distintas técnicas de detección, encuentran diversas sustancias que no debería haber en las vacunas Covid, es el caso del antimonio en todas las vacunas de Moderna, pero no encuentran grafeno ni grafito. Según el Sr Campra no se han utilizado técnicas adecuadas, pero en mi opinión no es verdad. El Sr Campra dijo en su video que yo había hablado de termogravimetría asociada a espectrometría de masas, pero no sé de donde se ha sacado eso. Yo hablé de cromatografía, que sí es una técnica de fraccionamiento y separación y de espectrometría de masas, concretamente es la técnica MALDI-TOF, con la que han caracterizado la composición de los cristales de colesterol, esos que según la secta grafenera son nanocircuitos. Los alemanes han utilizado también técnicas espectroscópicas que permiten la caracterización elemental y de materiales como son SEM, EDX e IPC, completamente capaces de detectar grafeno o grafito en caso de que lo hubiera habido. Otro tema en el que se apoyan los partidarios del grafeno es en las patentes para vacunas Covid con portador de grafeno. El grafeno es mucho menos adecuado que las nanopartículas lipídicas para la entrega y transfección del ARN vacunal a las células y por eso se han elegido como transporte y protección del ARN en las vacunas Covid estas últimas, ya que son vehiculadas por las lipoproteínas plasmáticas y así alcanzan una rápida biodistribución. Es precisamente la degradación, debido a la temperatura, de estas nanopartículas lipídicas la que genera muchos de los artefactos observados al mirar éstas al microscopio y también la responsable de su mayor o menor efecto tóxico al facilitar en función de su estabilidad la traducción a proteína espiga. Finalmente decir que me parece que el Sr Campra ha sido honesto reconociendo que no hay, por el momento, ningún estudio concluyente que pueda demostrar la presencia de grafeno o derivados en ningún tipo de vacuna, ni Covid ni ninguna otra. Y que hace muy bien en desmarcarse de la secta, una secta que ha convertido el grafeno y los MAC en pseudo-religión y que no ha conseguido ningún éxito judicial y solo frutos de odio y división, al contrario que muchos de nosotros que peritando y asesorando abogados hemos logrado evitar la vacunación Covid de niños y adolescentes cuyos padres estaban enfrentados por la decisión de vacunar. “Por sus frutos los conoceréis”. LA secta destructiva del grafeno ha concluido su recorrido tortuoso. Sólo le queda pedir perdón y hacer mutis por el foro a La Quinta Columna. |
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