La influencia indebida de Bill Gates, que sonríe con encanto benevolente pero se comporta como un calamar vampiro gigante, necesita desesperadamente ser eliminada de la política pública en todo el mundo. Gates aprendió sus métodos monopolísticos a los pies de su padre eugenista y a través de su empresa, Microsoft. Ahora incluso el izquierdista Politico admite que Gates está fuera de control.
El 14 de septiembre de 2022 Politico publicó un informe especial basado en cuatro docenas de entrevistas con funcionarios estadounidenses y europeos y especialistas en salud mundial, que admiten que Bill Gates está dirigiendo la respuesta mundial de COVID
Cuatro organizaciones sanitarias (la Fundación Bill y Melinda Gates, GAVI, la Coalition for Epidemic Preparedness Innovations (CEPI) y el Wellcome Trust) se pusieron rápidamente al frente de la respuesta mundial a la pandemia y aunque las cuatro afirman ser organizaciones independientes, en realidad todas están fundadas y/o financiadas por Gates
Durante los primeros días del brote, la Fundación Gates, GAVI, CEPI y Wellcome Trust iniciaron un esfuerzo coordinado para contactar a los fabricantes de vacunas, financiar pruebas, tratamientos farmacológicos e inyecciones de ARNm y desarrollar un plan de distribución mundial en colaboración con la Organización Mundial de la Salud. Al final no alcanzaron sus objetivos explícitos en todos los frentes
Gates no está cualificado para hacer recomendaciones sanitarias y nunca ha sido elegido para representar al público
Gates ha utilizado su riqueza, influencia y pura astucia para colocarse en una posición en la que puede dictar la política sanitaria mundial en su propio beneficio económico
La idea de que Bill Gates ejerce una influencia indebida sobre la salud mundial se ha negado sistemáticamente y se ha tachado de teoría de la conspiración. Pero, como ocurre con tantas otras cosas, esta teoría de la conspiración se está convirtiendo ahora en una realidad conspirativa.
El 14 de
septiembre de 2022, Politico publicó un
extenso informe especial basado en "cuatro
docenas de entrevistas con funcionarios estadounidenses y europeos y
especialistas en salud mundial", titulado "Cómo
Bill Gates y sus socios se hicieron con el control de la respuesta
mundial al COVID".
Como señala Igor
Chudov en Substack
(https://takecontrol.substack.com/p/does-bill-gates-run-the-world#footnote-2
), a las pocas horas el titular se editó para que dijera: "Cómo
cuatro grupos privados utilizaron su influencia para controlar la
respuesta mundial al COVID, con escasa supervisión ", como se
ilustra en las capturas de pantalla de Chudov que figuran a
continuación
(https://www.technocracy.news/health-officials-admit-bill-gates-really-does-run-the-world/
).
Artículo de Politico
Curiosamente,cinco
horas después de esa edición, Politico volvió a cambiar el
titular, de modo que en el momento de escribir este artículo, se lee
"Cómo Bill Gates y sus socios utilizaron su influencia
para controlar la respuesta mundial al COVID, con escasa
supervisión". La única palabra que falta ahora en el
titular original es "su".
En archive.today se puede ver cómo el titular cambió
de uns redacción a otra en el transcurso de 15 horas.
Cuatro
organizaciones de Gates monopolizan la respuesta mundial al
COVID
Según Politico cuatro organizaciones
sanitarias (la Fundación
Bill y Melinda Gates, GAVI,
la Coalition for Epidemic
Preparedness Innovations
(CEPI) y el Wellcome Trust)
asumieron rápidamente el liderazgo de la respuesta mundial a la
pandemia y, aunque las cuatro afirman ser organizaciones
independientes, en realidad todas están
fundadas y/o financiadas por Gates.
"Cuando
el Covid-19 apareció, los gobiernos del
mundo no estaban preparados", escribe Politico.
"Mientras las naciones
más poderosas miraban hacia dentro, cuatro organizaciones no
gubernamentales de salud mundial empezaron a hacer planes para una
lucha a vida o muerte contra un virus que no conocería
fronteras.
Lo que siguió fue un cambio de
poder constante y casi inexorable de los gobiernos abrumados a un
grupo de organizaciones no gubernamentales, según una investigación
de siete meses realizada por periodistas de POLITICO
con sede en Estados Unidos y Europa y el periódico alemán DIE
WELT.
"Armadas con
conocimientos especializados,
reforzadas por contactos en los niveles
más altos de las naciones occidentales y facultadas
por relaciones bien afianzadas con los
fabricantes de medicamentos, las cuatro organizaciones
asumieron funciones que a menudo desempeñan los gobiernos, pero sin
la responsabilidad de éstos".
Seis conclusiones
de la investigación de Político
Durante los primeros
días del brote, cuando los gobiernos aún debatían su gravedad, la
Fundación Bill y Melinda Gates, GAVI, CEPI y Wellcome Trust
iniciaron un esfuerzo coordinado para identificar a los fabricantes
de vacunas, financiar pruebas, tratamientos farmacológicos e
inyecciones de ARNm y desarrollar un plan de distribución mundial en
colaboración con la Organización Mundial de la Salud. En una barra
lateral Politico destaca seis puntos clave de su investigación:
"1) Las cuatro organizaciones han gastado casi 10.000 millones de dólares en la lucha contra el COVID desde 2020, la misma cantidad que la principal agencia estadounidense encargada de combatir el COVID en el extranjero.
2) Las organizaciones dieron colectivamente $ 1,4 mil millones a la Organización Mundial de la Salud, con el fin de crear una iniciativa decisiva, para imponer medidas en relación con el COVID-19. Ese programa no logró alcanzar sus objetivos iniciales
3) Los líderes de las organizaciones tuvieron un acceso sin precedentes a los niveles más altos de los gobiernos, gastando al menos 8,3 millones de dólares para presionar a legisladores y funcionarios en Estados Unidos y Europa.
4) Funcionarios estadounidenses, de la UE y representantes de la OMS pasaron por estas cuatro organizaciones como empleados, lo que les ayudó a consolidar sus conexiones políticas y financieras en Washington y Bruselas.
5) Los líderes de las cuatro organizaciones se comprometieron a salvar la brecha de equidad. Sin embargo durante las peores oleadas de la pandemia los países de bajos ingresos se quedaron sin las vacunas que salvan vidas.
6) Los dirigentes de tres de las cuatro organizaciones sostuvieron que no era necesario levantar las protecciones de la propiedad intelectual para aumentar el suministro de vacunas, lo que, en opinión de los activistas, habría ayudado a salvar vidas."
No cualificado y no elegido
Como detalla Politico, a través de los grupos de presión y el poder financiero de Gates la respuesta internacional al COVID pasó rápidamente de los gobiernos individuales a "un grupo mundial de expertos no gubernamentales supervisado de forma privada."
En Estados
Unidos el presidente Biden ha destinado 500 millones de dólares sólo
al CEPI en su presupuesto COVID de 5.000 millones de dólares, que
aún debe ser aprobado por el Congreso. Pero, como señala Kate
Elder, asesora principal en política de vacunas de la Campaña
de Acceso (Access Campaign) de Médicos
Sin Fronteras:
"¿Qué hace que
Bill Gates esté cualificado para dar consejos y asesorar al gobierno
estadounidense sobre dónde deberían destinar… tremendos
recursos?".
Lawrence Gostin, profesor de la
Universidad de Georgetown especializado en derecho de la salud
pública declaró a Politico:
"Creo que deberíamos
estar profundamente preocupados. Dicho de un modo muy burdo, el
dinero compra influencias. Y ésta es la peor clase de influencia. No
sólo porque es dinero (aunque eso es importante,
porque el dinero no debería dictar la política), sino
también porque es proporciona preferente a puerta
cerrada. Es antidemocrático, porque es extraordinariamente opaco y
poco transparente y deja de lado a la gente corriente, a las
comunidades y a la sociedad civil".
Gates
es el "dueño" de la OMS
Muchos han
señalado que Gates, a través de sus miles de millones en donaciones
a la OMS, tiene una influencia significativa sobre las decisiones de
esa organización. En septiembre de 2021 la doctora Astrid
Stuckelberger, una persona de dentro de la OMS, denunció a Gates
explicando cómo la OMS está, de hecho,
controlada por Gates,
que a su vez dicta su
la política para su
propio beneficio financiero personal.
De
las cuatro organizaciones en las que se centra Politico, GAVI, la
Alianza para las Vacunas, puede ser la más importante. GAVI, fundada
por Gates, tiene su sede en Suiza. En 2009, GAVI fue reconocida como
institución internacional y se le concedió
inmunidad total, incluida la inmunidad
diplomática cualificada, lo que resulta extremadamente
extraño si se tiene en cuenta que la organización no tiene ningún
poder político que justifique la inmunidad diplomática. Más
extraño aún es que las cláusulas de inmunidad de GAVI vayan más
allá incluso de la de los diplomáticos. La inmunidad de GAVI cubre
todos los aspectos de la participación, incluidos
los negocios delictivos. Igualmente extraño es el hecho
de que esté completamente exentas
de impuestos. Básicamente, GAVI puede hacer lo que quiera
sin ninguna consecuencia. La policía ni
siquiera puede investigar o recoger pruebas de GAVI si se viera
implicada en una investigación criminal. Así
de bien protegida
está. Y según Stuckelberger GAVI
es la entidad que realmente dirige a la OMS.
Según
Stuckelberger Gates solicitó en 2017 entrar en el consejo ejecutivo
de la OMS (como un Estado miembro), supuestamente porque les da mucho
dinero. No hay pruebas de que a Gates se le haya concedido
oficialmente el estatus de Estado miembro, pero parece que ideó un
juego de poder alternativo.
Stuckelberger señaló que Gates y la OMS firmaron un acuerdo contractual a tres bandas con Swissmedic, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Suiza, lo cual es muy poco habitual. Así que esencialmente, cuando Gates no consiguió ser votado como un estado nación unipersonal, creó contratos a tres bandas con los estados miembros y la OMS ¡esencialmente colocándose a la altura de la OMS!
Una curiosidad que apoya la idea de que Gates es el
verdadero poder detrás de la OMS o tiene la misma cantidad de poder
que la OMS, es el hecho de que Gates ha sido repetidamente el primero
en anunciar lo que el mundo necesita hacer para hacer frente a la
pandemia y luego la OMS salía con un mensaje idéntico, que los
estados miembros luego se obligaron a seguir.
Pero, ¿quién
demonios es Gates para dirigir la salud mundial y las respuestas a la
pandemia? Es un don nadie. No tiene formación médica. No está
cualificado en absoluto para hablar de cuestiones sanitarias. Ni
siquiera se graduó en la universidad. Y nunca ha sido elegido para
representar al pueblo en ningún aspecto.
Básicamente, lo
que tenemos aquí es un individuo muy rico que descubrió una manera
de monopolizar extraoficialmente la capacidad de toma de decisiones
de una autoridad sanitaria mundial con el fin de enriquecerse, lo
cual es más que una locura.
La OMS fue instrumental
en el ascenso al poder de Gates
La influencia
de Gates sobre la OMS es, sin duda, la razón por la que la OMS
permitió a estos cuatro grupos financiados por Gates dirigir la
respuesta mundial al COVID por encima de cualquiera. Como informa
Político:
"La OMS fue crucial para el ascenso al
poder de los cuatro grupos. Todos ellos tenían antiguos vínculos
con el organismo sanitario mundial. Los consejos de CEPI y Gavi
cuentan con un representante de la OMS especialmente designado.
También existe una puerta giratoria
entre el empleo en los grupos y el trabajo para la OMS: Antiguos
empleados de la OMS trabajan ahora en la Fundación Gates y el CEPI;
algunos, como Chris Wolff, subdirector de
asociaciones con países de la Fundación Gates, ocupan puestos
importantes. Gran parte de la
influencia de estos grupos en la OMS se debe simplemente al dinero.
Desde el inicio de la pandemia en 2020, la Fundación Gates, Gavi y
Wellcome Trust han donado en conjunto
más de 1.400 millones de dólares a la OMS, una
cantidad significativamente mayor que la mayoría de los demás
estados miembros oficiales, incluidos Estados Unidos y la Comisión
Europea, según datos facilitados por la OMS."
Una
cosa sería si estas organizaciones realmente hicieran un trabajo
excelente. Pero no lo hicieron. Una revisión independiente
realizada por Dalberg Global Development
Advisors, una empresa neoyorquina de asesoramiento
político, concluyó que la iniciativa creada por los grupos de
Gates, el Acelerador del Acceso a las
Herramientas COVID-19 (ACT-A),
fracasó en todos los frentes.
A pesar de contar con un
presupuesto de 23.000 millones de dólares, ACT-A sólo
consiguió el 16% del número de pruebas que se había fijado como
objetivo para los países de renta baja y media y de los 245
millones de tratamientos que se suponía que debía suministrar a
los países de renta baja y media, sólo asignaron 1,8 millones. Del
mismo modo, de los 2.000 millones de inoculaciones de COVID que
debían haberse administrado para finales de 2021, solo se
administraron 319 millones de dosis.
Por supuesto, se
podría argumentar que el fracaso en la entrega de pruebas
fraudulentas de RCP y tratamientos
peligrosos e inoculaciones
de ARNm fue una bendición
no deseada. Pero lo cierto es que estas
organizaciones distan mucho de ser excelentes y fracasan
estrepitosamente en la consecución de muchos de sus objetivos
declarados.
Prometen demasiado y cumplen poco. Están
dispuestas a sacrificar vidas para mantener el control sobre
patentes que generan dinero. Y, aunque más o menos son las únicas
que dan forma a la respuesta mundial a las pandemias, no
hay nadie que les pida cuentas de su actuación.
Lo
que Politico omitió
Aunque el informe de
Político es muy amplio, no incluye varias piezas importantes del
rompecabezas, enumeradas en el artículo de Chudov en Substack. Por
ejemplo:
El SARS-CoV-2 parece ser un arma biológica
diseñada intencionadamente.
La Fundación Bill y Melinda Gates ayudó a organizar el Evento 201, un ejercicio de preparación pandémica de mesa en octubre de 2019 que predijo proféticamente el COVID-19 y la necesidad de una campaña masiva de propaganda y censura para sofocar las "conspiraciones" sobre el virus.
Gates compró 3,1 millones de acciones de BioNTech en septiembre de 2019 por 55 millones de dólares. En ese momento, BioNTech estaba trabajando en inmunoterapias específicas para pacientes con cáncer y otras enfermedades crónicas. A mediados de marzo de 2020, BioNTech se asoció con Pfizer para desarrollar un inyección de ARNm para COVID. En agosto de 2021 la clarividente inversión de Gates tenía un valor de 1.700 millones de dólares.
La Fundación Gates financió EcoHealth Alliance, la organización sospechosa de haber participado en el desarrollo del SARS-CoV-2.
La Fundación Gates también financió con al menos 56 subvenciones diferentes a la Universidad de Carolina del Norte (UNC), donde el doctor Ralph Baric llevó a cabo una investigación de ganancia de función vinculada al desarrollo del SARS-CoV-2. Baric también trabajó con EcoHealth Alliance, organización sospechosa de haber participado en el desarrollo del SARS-CoV-2. Baric también trabajó con EcoHealth Alliance y el Instituto de Virología de Wuhan (WIV).
Como señaló Chudov en su discurso de clausura:
"Sin embargo, la mera publicación de este artículo tiene una enorme importancia. Las cosas que la mayoría de nosotros sabemos y de las que hablamos, están apareciendo en la llamada 'prensa dominante' (después de que todo el daño estuviera hecho, por supuesto). El virus fue liberado; millones murieron; más de mil millones de jóvenes fueron vacunados a la fuerza bajo falsos pretextos. Cuando ya es demasiado tarde para cambiar nada, Politico afirma por fin lo obvio. Aun así, es mejor que nada. Casi todo lo que se dice en el artículo de Politico se sabía hace un año. ¿Dónde estaba Politico entonces? Ocupado recibiendo dinero del gobierno para publicidad de la vacuna COVID. La pandemia fue un crimen, no un accidente".
El
plan Gates-Fauci para vacunar al mundo
Sin embargo
Gates no es ni mucho menos la única némesis en este drama
orquestado. El Dr. Anthony Fauci es otro actor clave.
Irónicamente Gates afirma que se ha "llevado la peor parte del
abuso de la conspiración COVID" porque los europeos no conocen
a Fauci. Recientemente declaró a la revista Fortune:
"Fue
todo un fenómeno; aquí, en Estados Unidos, se centró en mí y en
Tony Fauci, e internacionalmente se centró más en mí porque no
sabían quién era Tony… ¡realmente se lo perdió!".
Pero
mientras Gates intenta hacer pasar por una broma la preocupación de
la gente por su influencia indebida sobre su salud, no faltan pruebas
de que realmente mueve unos hilos para los que no está ni mucho
menos cualificado.
En "Bill Gates Lays Out Plan
for Global Takeover"
(https://www.globalresearch.ca/bill-gates-lays-out-plan-global-takeover/5781491
), analizo el papel de Gates en la OMS y el plan de la OMS para, en
última instancia, hacerse con el control de todas las decisiones
sanitarias en todo el mundo. También he repasado cómo Gates
y Fauci han colaborado, formando una formidable
asociación público-privada que ejerce un increíble poder sobre el
público estadounidense.
Ya en 2000 Fauci y
Gates formaron un acuerdo para controlar y expandir la empresa
mundial de vacunas, que en 2021 culminó en un plan para inyectar a
cada hombre, mujer y niño del planeta una inyección experimental de
COVID. La colaboración de Gates y Fauci se detalla en el exitoso
libro de Robert F. Kennedy Jr. "The Real Anthony
Fauci". El vídeo que encabeza este artículo resume su
plan conjunto.
https://www.technocracy.news/health-officials-admit-bill-gates-really-does-run-the-world/
https://www.politico.com/news/2022/09/14/global-covid-pandemic-response-bill-gates-partners-00053969 (How Bill Gates and partners used their clout to control the global Covid response — with little oversight, Cómo Bill Gates y sus socios utilizaron su influencia para controlar la respuesta mundial a Covid, sin apenas supervisión)
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